La tecnología de paneles fotovoltaicos se encuentra en constante evolución, especialmente en los últimos años, en los que la competitividad entre los fabricantes más reconocidos del sector no deja de crecer en busca del módulo más eficiente y que aproveche al máximo el recurso solar.
El panel fotovoltaico monofacial convencional se encarga de captar la irradiación solo por una cara, en la cual se encuentran las células. En los últimos años, comienza a notarse un mayor interés por la tecnología de módulo bifacial que, a grandes rasgos, se podría definir como la capacidad que tienen los captadores de producir energía tanto por la parte frontal como por la posterior.
Esta tendencia en paneles solares comienza a desarrollarse de manera más clara en el mercado a principios de la década pasada, y cada vez son más los clientes que optan por este tipo de solución, especialmente en grandes proyectos, donde las condiciones del terreno para su ejecución suelen ser menos críticas.
El módulo bifacial en este caso posee dos capas de células fotovoltaicas con tecnología PERC. La situada en la parte superior tiene como objetivo la captación de la irradiación solar de manera directa, mientras que la capa situada en la parte inferior es la encargada de captar la irradiación difusa que refleja sobre la superficie en la que están situados los módulos. Otra de las características de la tecnología bifacial es el empleo de células fotovoltaicas de alto rendimiento con múltiples bus-bar, con el objetivo de aumentar al máximo el flujo de electrones. Esto supone una gran ventaja en caso de que haya alguna microrrotura parcial en alguna célula, ya permite que el flujo de electrones no se vea interrumpido.
Comportamiento de un módulo fotovoltaico bifacial vs uno convencional. Fuente: LG Electronics.
Incremento de producción para el modelo LG300N1T-G4. Fuente: LG Electronics.
Rendimiento adicional con relación a la superficie y altura de los módulos. Fuente: LG Electronics.
En las fichas técnicas de los módulos bifaciales la potencia del módulo vendrá indicada por la capacidad máxima de producción en la parte directamente expuesta al sol, y es por este motivo por el que todas las condiciones nombradas con anterioridad tendrán mucho que ver en el incremento del rendimiento final del panel fotovoltaico. Emplear un módulo con tecnología bifacial nos exige prestar especial atención a la hora de escoger el inversor fotovoltaico adecuado y/o a la hora de hacer uso de optimizadores de potencia. Estos son los parámetros en los que debemos fijarnos con detenimiento:
En conclusión, la tecnología bifacial se encuentra en pleno auge y desarrollo y nos permite un aumento del rendimiento de las instalaciones fotovoltaicas y una mayor producción. Hay que tener en cuenta todos los factores que pueden influir en nuestro proyecto y que puedan hacer que sea más o menos interesante el empleo de esta tecnología.
El incremento en las ventas de este tipo de módulos ha sido notable en los últimos años y pone en evidencia que este producto se está haciendo un hueco en el mercado para distintas aplicaciones, y sobre todo en proyectos de gran envergadura en los que las condiciones del terreno y el método de montaje nos permiten un mayor aprovechamiento de las ventajas asociadas. Es de esperar que en un futuro la potencia pico de estos módulos vaya elevándose, e incluso se puedan alcanzar rendimientos mayores de los que se manejan actualmente.