El fabricante de baterías solares BYD es uno de los pioneros en ofrecer soluciones de acumulación de litio para numerosas aplicaciones, como movilidad eléctrica o vehículos industriales, entre otros. En este año 2020, la empresa asiática ha lanzado al mercado su nueva generación de acumuladores de litio ferrofosfato para aplicaciones en instalaciones fotovoltaicas, tanto de autoconsumo conectado a red como sistemas aislados.
Con estos nuevos modelos, BYD pretende optimizar la calidad que ya caracterizaba a sus modelos anteriores y pulir ciertos aspectos que en ocasiones podrían suponer pequeños quebraderos de cabeza para los instaladores.
Los nuevos modelos se diferencian de los anteriores en las siguientes nomenclaturas:
Entre las principales ventajas de esta nueva generación de baterías solares podríamos destacar las siguientes:
Si tuviéramos que diferenciar entre los distintos modelos, deberíamos tener en cuenta principalmente la tensión de trabajo de los sistemas. Los modelos Premium HVS y HVM trabajan en rangos de tensión entre los 204 y los 512 Voltios en CC, lo que nos permite soluciones de acumulación más seguras y con menores perdidas en el cableado debido a que la intensidad que concurre por los circuitos es menor. Esto nos ayuda también a reducir costes en secciones de los conductores. La conexión entre módulos que pertenezcan a una misma torre se realiza en serie, por lo que la adicción de nuevos módulos también conlleva un aumento en la tensión de trabajo de la batería y que deberemos tener en cuenta a la hora de elegir el inversor al que queremos conectarla.
En síntesis, las capacidades de ampliación en modelos de alto voltaje serían las siguientes:
Por otro lado, los modelo LVS y LVM trabajan a una tensión nominal fija de 51,2 Voltios, y la conexión de diferentes módulos y torres se realiza en paralelo. Para el modelo LVS, las ampliaciones se pueden realizar en módulos de 3,7 kWh, por lo que es la solución perfecta cuando buscamos aumentar gradualmente la capacidad de nuestro sistema de baterías en la instalación fotovoltaica.
Cuando estamos hablando de soluciones de acumulación de mayor envergadura, y en las cuales la escalabilidad se quiere realizar de manera más amplia, podemos hacer uso de los modelos LVL de 15,4 kWh e ir aumentando en módulos equivalentes hasta un total de 64 unidades. De esta manera podemos alcanzar acumulaciones próximas a 1 MWh.
A la hora de proyectar un sistema fotovoltaico, es muy importante conocer las compatibilidades entre diferentes marcas, tanto si se quiere desarrollar un proyecto de autoconsumo con acumulación como un sistema aislado de la red pública.
Aunque hay algunas excepciones, los modelos de “alto voltaje” se suelen utilizar en mayor medida para instalaciones fotovoltaicas de autoconsumo conectado a red, haciendo uso de inversores solares híbridos capaces de gestionar tanto módulos fotovoltaicos como baterías. Estos inversores nos permiten gestionar en la mayoría de los casos paneles fotovoltaicos y batería en un mismo equipo, lo que permite unificar la solución con pocos componentes y optimizar la eficiencia de estos.
Los nuevos modelos de BYD Premium HVS y HVM son compatibles con los principales fabricantes de inversores fotovoltaicos. Es el caso, por ejemplo, de los nuevos modelos Fronius Primo y Symo GEN24 del fabricante austriaco, los inversores Sunny Boy Storage de SMA, y los equipos de Kostal Piko MP-PLUS y Plenticore Plus.
Además, resulta reseñable que algunos de estos modelos incorporan una salida EPS (Emergency Power System) por lo que, en caso de apagón de la red pública, podríamos seguir teniendo suministro en nuestra vivienda gracias a la energía acumulada en la batería, ya que una de las ventajas que presentan las nuevas baterías HVS y HVM es su capacidad de poder funcionar en modo off-grid sin que ello comprometa su vida útil.
Respecto a las soluciones de “bajo voltaje”, los modelos LVS y LVL son compatibles con inversores fotovoltaicos con tecnología para aplicaciones off-grid, como los modelos Sunny Island de SMA o la gama de Victron de 48 V. Ambos fabricantes nos permiten proyectar desde pequeños sistemas aislados para viviendas hasta instalaciones mini-grid trifásicas capaces de abastecer pequeñas poblaciones en lugares en los que el acceso a la red púbica es algo más difícil. La gran escalabilidad, tanto de los modelos LVS como de los modelos LVL, facilitan la viabilidad de este tipo de proyectos, así como su independencia.
En conclusión, podemos decir que la gama de nuevas baterías solares de BYD entra con fuerza en el mercado para ponerse a la cabeza respecto a sus competidores en lo que se refiere a soluciones en tecnología de litio para instalaciones fotovoltaicas. El fabricante asiático ha conseguido pulir esos detalles que limitaban la anterior generación, como la ya comentada mejor eficiencia y reducción de peso, aumentando así la densidad energética de los módulos, la escalabilidad de los modelos de alto voltaje -que no era posible anteriormente- y la unificación del procedimiento de puesta en marcha.
Su larga experiencia en este tipo de tecnología y su ya destacada andadura en el sector de las energías renovables nos aseguran un producto sólido y eficaz que viene para posicionarse como la mejor solución a tener en cuenta cuando queremos hacer que nuestro sistema fotovoltaico sea lo más independiente de la red. De este modo, se contribuye a un modelo de consumo de energía sostenible y respetuoso con el medio ambiente, aportando un granito de arena más en la lucha por el cambio climático y la reducción de modos de producción energéticos dependientes de combustibles causantes de una gran cantidad de emisiones contaminantes y de efecto invernadero.