El silicio es una de las materias primas semiconductoras más comunes utilizadas en la producción de células fotovoltaicas, y representa casi el 95% de los módulos solares vendidos hasta la fecha. Entre 2020-2021, ha habido una importante reducción de la producción de silicio, lo que ha afectado a la industria solar a gran escala.
Esto provocó una importante escasez de chips de silicio, lo que a su vez causó un aumento repentino de los precios del silicio. Los precios del silicio metálico han aumentado un 300% desde principios de agosto de 2021, debido a las órdenes aprobadas por la provincia de Yunnan de no superar la producción de silicio en un 10% de la producción de agosto. Los precios del polisilicio han alcanzado su punto más alto en casi una década. A su vez, esto ha causado grandes estragos en la industria solar, ya que depende en gran medida de los chips de silicio. Además, la prohibición no oficial de Pekín de importar carbón de Australia ha producido un efecto dominó en el suministro energético de China, afectando aún más a la producción de silicio.
Alrededor del 80% del precio de un módulo fotovoltaico depende del coste de las materias primas. El cambio en los precios de las materias primas ha afectado considerablemente a toda la cadena de suministro fotovoltaico. Desde principios de 2021, el precio de los módulos solares fotovoltaicos ha aumentado drásticamente debido a un repunte en los precios del silicio.
Los precios de los módulos solares han aumentado un 18% desde principios de 2021, tras una caída del 90% durante la última década. Esto provocará retrasos en los proyectos de instalación de paneles solares, lo que frenará aún más el crecimiento de la industria solar. Dado que China es el primer productor mundial de polisilicio, con una cuota del 67%, esto crea una gran dependencia de los países importadores respecto a China. Además, la industria del silicio se ve aún más afectada por el aumento de las tensiones entre China y Estados Unidos.
Es probable que la oferta de silicio aumente en 2022, pero si su demanda aumenta al mismo ritmo, se espera que el equilibrio entre la oferta y la demanda siga siendo ajustado en 2022. Como resultado, se espera que los precios de los módulos fotovoltaicos sigan siendo altos en los próximos meses.